No es bonito, ni agradable, ni tan siquiera pasable. No es
nada que quisieras en el pasado, no es un deseo, no es necesario, no es lo que
pensabas que sería, no es música ni pintura ni escultura, no es literatura, no
es ficción, no es cine, no es lo que uno apostaría, no es nada que mires a los
ojos.
No soy yo, o quizás sí. Y si lo soy es un desastre, soy un
desastre. Hora de mirar el espejo, hora de observar las madejas del día a día
para deshacerlas, hora de montar un rompecabezas distinto, hora de caminar
porque ahora no camino, hora de leer, de escuchar, de comprender, hora de huir.
Gracias por los trazos en la arena del desierto…ayudan.