martes, 9 de julio de 2013

Relfexiones pergumenianas

Días o gusanos, nervios en el corredor que espera un momento de tu tiempo para liquidarte. No queda nada de lo que eras, no queda nada porque la dictadura te arrebató de ti mismo, eliminó tu ser, prescindió de lo que eras porque no valías para nada.

Cambios insistentes que te favorecen cuando tienes dolor de alma al llorar por lo que valorabas que te abandonó. Porque quieres volver con él cuando nunca te dio un beso, cuando nunca te regaló una lágrima de felicidad, nunca se enamoró de las caricias de tuas manos, nunca pensó que tus palabras eran especiales, nunca supo contemplar tu cabello y quedar rendido, nunca escuchó tus esdrújulas en modo amor, nunca te buscó por las noches al otro lado de un teléfono mientras estabas tumbada en tu cama, nunca buscó el número de una habitación para llamarte, nunca rompió el hielo de un maldito enero, nunca habló contigo deseándote de un modo prohibido, nunca esperó por ti un nuevo asalto, nunca te buscó en un concierto mientras su novio iba de su mano, nunca te sacó del hoyo d ela tristeza sin querer, nunca te pidió que la acompañaras a una isla desierta, nunca sentiste que sus brazos se movieran para impactarte en un golpe invernal, nunca pensaste que su regalo era falso, nunca, nunca, nunca...

Nunca pensaste lo que podrías llegar a quererla.

No sé de dónde viene la imagen, pero siendo una isla me recordó una frase...

El hielo durará mil años y dudo que alguien nos encuentre querida dama.

Hoy lloro, querido Aloysius.

Brideshead Revisited
Gari Sandance

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los asesinos de la inteligencia no llevan armas y son gente tranquila...

  Y cuando el mundo aparece resulta que tu amigo estaba durmiendo. Nadie quería despertarse con ese sonido. Pero a ti la música te martillea...