miércoles, 20 de octubre de 2021

Tras el futbol con arab straps...versos imposibles

No hay tantas luces en la ciénaga

No hay un rumor que sugiera tu marcha

Ni tampoco una pequeña brinza de hierba

Que me digas que no estás rota

No hay una sugerencia después de tantos años

No hay nada que esté tan cerca como para adivinar tu sonrisa

No existen los días ni las noes tan solo gritos

No tienes un futuro sacrificado en el café

Ni tus maravillosas beldades nadan en capitostes

Son, solamente, el refugio de la esquina donde mareamos

Perdices o quizás otras Evas o aves

O el rumor de una amistad en una aparato de miles de palancas

En las que nos había de esperar en un zaguán

El señor que nos sonríe de dos a tres

Ese señor que nos muestra donde aposentar

Mi puto culo,  porque tú lo odiabas

Y no entendía nada ni tú tampoco

El menor de los designios estaba reptando en tu habitación

Como lagartos jugando a ser salamandras que se disfrazan de lagartos

Dime donde te escondiste ayer

Porque te estuve esperando esa puta mañana

Entre cafés imposibles y cervezas llenas de espuma

Y recordé la esquina donde no os encontramos ayer

Donde los rumores sugieren secuencias

Y las secuencias hablando del maestro Truffaut

Y descubro como las esquirlas del horror están bailando

En sinuosas danzas

Que ni tu ni yo quisimos bailar

Porque teníamos prisa

La prisa de la ducha en tus pechos desnudos

 


martes, 19 de octubre de 2021

Poesía...

 No soy bueno en poesía erótica...bueno en general no soy bueno en poesía. Los versos eróticos son materia de otro blog desértico.

Cosas que empiezan como

"Duchas imposibles..."

lunes, 18 de octubre de 2021

Errores

¿Me habré equivocado por pensar sin pensar o pensarte sin pensar que me pensabas?

¿Acaso no son mis errores más que los que comete un equipado en el camino de buscar un territorio de encuentro donde mirarte?

Las duchas no mencionadas inhiben el deseo que dejamos perdido, como ese libro en el que has perdido el marcapáginas y no sabes por dónde continuar.


sábado, 16 de octubre de 2021

Increible...

 ¿Cómo es posible haber llegado hasta aquí?

¿en qué momento se torcieron las sonrisas?

¿en qué instante el desastre tornose rutina?

¿cuándo la ruindad conquistó nuestro ir y venir?

¿Cómo fueron los disturbios? ¿qué llegamos a decir?

¿dónde quedaron los deseos y el rumor dulce de la brisa?

¿cuándo se cubrieron de ponzoña nuestras risas?

¿cuándo se borró la huella en tus labios de carmín?

miércoles, 13 de octubre de 2021

sábado, 9 de octubre de 2021

Pintando sin pintar

 


No quiero ser tu fantasma, ni el tuyo ni el mío…ni el de nadie. Y no soy como los demás, solamente soy el que camina entre los huecos que dejan tus deseos y tus palabras, en ese resquicio imposible me cuelo para intentar ver lo que hay detrás de tu alma, y apenas distingo nada. Soy incapaz de vislumbrar las formas que bailan más allá de tu umbral. No entiendo lo que me dices cuando camino a tu lado, oigo demasiadas cosas de tus labios y un epsejo hace que te reflejes en mil siluetas distintas sin saber cuál es la que puedo tocar.

No hay tantas esquinas en mis días, solamente las que permiten doblar a otra calle para alternar las estaciones y los colores del día a día. No había nada premeditado ni un plan urdido como un contubernio en una maquiavélica maniobra de película de cine negro hollywoodiense.

No hay nada en lo que digo que se parezca a las descripciones del horror, pero el horror me lo asignaron como aquel que tiene que transportar una mochila repleta de piedras sin más solución que caminar o pararte y ver cómo te alejas o intentar seguir con las toneladas de guijarros en los hombros.

No veía amigos en las heces de mis palabras, tampoco vi como las odiaban, no era una cuestión de confidentes en el pasillo de los románticos, era más bien una cuestión de creer aunque sorprenda lo que hay que creer. Eran los pasos entre una hierba que crecía demasiado ayer y que mañana ya no va a crecer. Los sueños se tornan negros y un reflejo de cualquier deseo se vuelve temeroso porque no notamos que quieras que tu aliento se deslice entre los sonidos de la mañana para dar calidez al día. No hay nada más que los fantasmas que quisiste pintar.

Los asesinos de la inteligencia no llevan armas y son gente tranquila...

  Y cuando el mundo aparece resulta que tu amigo estaba durmiendo. Nadie quería despertarse con ese sonido. Pero a ti la música te martillea...