Un arbusto que me habla
Tres haciendas y unas perlas
Que me dicen de tus roles
Tengo y tengo y tengo tres mil torpes
Con sonrisas que le rabian
Como barcos que renuncian a sus velas
Como un árbol que si serlo es un boje.
Y cuando el mundo aparece resulta que tu amigo estaba durmiendo. Nadie quería despertarse con ese sonido. Pero a ti la música te martillea...
No hay comentarios:
Publicar un comentario